Con los restos de poda, con ramas, con frutos de colores, con hojas, con flores, y alguna cinta bonita, pinturas en sprays, o lo que se nos ocurra, podemos formar una corona navideña que dé la bien venida a todos aquellos que vengan a visitarnos. Repito, nada de ir a comprarla a esas tiendas de "made in china", en vuestros jardines, en los montes cercanos, siempre respetando las especies protegidas, animaros, seguro que a los más pequeños les encanta.
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