Y A TU PUERTA LLAMARÁN

 Si queréis que se queden mirando, si deseáis que se pregunten quien vivirá ahí...hacer que sea deseable que llamen a la puerta. Darle color, ese toque, buscar topiarias, arbustos, y algo tan importante o más que los arbolitos, unos preciosos maceteros o contenedores. Siempre bien drenados, gravas en el fondo y  si son en cerámica  entremezclar tierra y grava  para que en invierno el agua se drene mejor, y no se congele dentro rompiéndolos.